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Con los años es más difícil quitarse los kilos que te sobran y esto es así porque el metabolismo se hace más lento, a medida que vamos cumpliendo años el cuerpo quema menos calorías y las que no las gasta las convierte en grasa. Durante la infancia y la adolescencia el metabolismo aumenta porque el organismo necesita crecer, formar y reparar tejidos. Luego, a medida que avanzamos en edad, el metabolismo desciende porque el cuerpo no necesita crecer más.
Muchas veces en consulta he escuchado esta frase de mis clientes:
– Es que cada año que pasa he puesto un kilo de más comiendo lo mismo.
Y esto es así porque cuanto más edad tenemos, más disminuye nuestro metabolismo y cuesta más perder peso, aún comiendo lo mismo. Además en muchos casos la vida de la persona es más tranquila, reduce su ritmo y esto conlleva un aumento de peso.
También hay que decir que la genética influye mucho porque hay personas que tienen tendencia a coger peso. Otra de las causas que también influye es la disminución de ciertas hormonas como la del crecimiento, la progesterona, la testosterona… estas hormonas contribuyen al descenso del metabolismo y a la pérdida de masa muscular.
Para evitar que este descenso del metabolismo nos lleve a un aumento de peso es muy importante:
- Tener una dieta equilibrada rica en verduras, frutas, grasas de calidad, proteínas, hidratos de carbono… evitando las grasas saturadas, los dulces, la bollerías, los precocinados…
- Realizá actividad física regularmente ya que la práctica de ejercicio físico diario acelera el metabolismo.
- Bebe agua, por los menos dos litros al día ya que te ayudará a eliminar toxinas y residuos.
- No te saltes comidas, ya que no comer provoca una reducción del gasto calórico. Es mejor comer poca cantidad y varias veces al día, ya que mientras se come se queman calorías.
- Evita el estrés. Aparte de que afecta a la capacidad del cuerpo para optimizar los nutrientes, muchas veces el estrés hace que comamos peor.
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