Alimentos que te curan

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Aceite de Oliva

El aceite de oliva es un alimento tradicional de la dieta mediterránea con numerosas propiedades beneficiosas. Compuesto casi el 70% de ácidos grasos monoinsaturados presenta efectos beneficiosos a nivel cardiovascular. Contribuye a reducir el colesterol malo (LDL) sin afectar al bueno (HDL), está indicado en la prevención de enfermedades degenerativas como cáncer, infarto… y en personas con patologías crónicas como la diabetes. Es rico en vitamina E y carotenoides que ayuda contra el envejecimiento celular.

Almendra

La almendra es una buena fuente de proteínas, grasas monoinsaturadas y minerales, su concentración en hierro, calcio y magnesio es especialmente destacable. Numerosos estudios han demostrado los efectos positivos del consumo de almendras en la reducción de colesterol en sangre y para estabilizar la glucemia de las personas que tenemos diabetes. Estos efectos se consiguen tomando almendras de forma regular en pequeñas dosis (20 a 30gr al día).

 Avena

La avena se consume sobre todo en copos o en salvado. Como todos los cereales no refinados, es rica en glúcidos complejos, fibra y minerales. Se ha demostrado que la avena disminuye el colesterol y equilibra la glucemia ya que es rica en betaglucanos una fibra soluble que favorece la eliminación del colesterol y ralentiza la absorción de los glúcidos, mejorando las glucemias de las personas que tenemos diabetes.

Espárrago

Es una hortaliza con muy pocas calorías y muchos minerales. Contiene mucho potasio, calcio y oligoelementos; es remineralizante. Aporta fibra y contienen sustancias que favorecen la diuresis: los fructosanos. El espárrago es diurético, los fructosanos actúan junto con el potasio y el agua que contiene y favorecen la eliminación de líquidos a través del riñón. Los espárragos de color verde contienen pigmentos vegetales que le confieren un poder antioxidante muy útil para prevenir el envejecimiento de las células.

Granada

Fruta típica de la vertiente mediterránea, tiene un poder antioxidante especialmente elevado. Contiene alrededor de 16 gr de glúcidos por 100 gr y aporta 74 kcal. Numerosos estudios han demostrado que la granada es beneficiosa para la salud debido a su elevada concentración de antocianos que tiene un efecto positivo sobre el cáncer de próstata y de colon y las enfermedades cardiovasculares. Además la granada tiene propiedades protectoras para el cerebro.

Jalea Real

Es un producto fresco y vivo que contiene oligoelementos, enzimas, sustancias antibióticas y acetilcolina. La jalea real estimula las defensas naturales del organismo, contiene moléculas llamadas adaptógenas que nos ayudan a responder mejor al estrés crónico y nos aportan una sensación de bienestar.

Kéfir

El kéfir de leche presenta el mismo aporte calórico que la leche, es decir, de 30 a 50 kcal por 100 ml. El preparado se enriquece gracias a una flora de organismos vivos que favorecen la digestión. El kéfir se aconseja a todas las personas cuyas necesidades de calcio y proteínas sean elevadas (adolescentes y personas mayores). Su concentración en bacterias y levaduras vivas estimulan las defensas inmunitarias y equilibran la flora intestinal.

Salmón

A menudo se piensa que el salmón es muy calórico, ya que forma parte de los pescados azules. En realidad, una ración de 100 g aporta unas 200 kcal. Su nivel de lípidos es de 12 g/100g, una parte de los cuales son omega 3, indispensables para nuestra salud. Una ración de 100 g de salmón cubre el 60% de las necesidades de estos ácidos grasos esenciales. También aporta vitamina B12, vitamina D y caroteno, destaca su riqueza en proteínas (20/100 g) de una excelente calidad nutricional. Se aconseja consumir pescado azunal una o dos veces por semana, ya que su aporte de omega 3 tiene efectos beneficiosos en la protección cardiovascular.

El té al natural no aporta ninguna caloría. Pero si se le añade azúcar o un poco de leche, una taza de té no representa más de 30 kcal. El té contiene minerales y oligoelementos. No aporta prácticamente vitaminas, pero sí polifenoles y teína, un estimulante parecido a la cafeína. El té verde y el blanco son más ricos en antioxidantes. Sin embargo, el té negro presenta un alto poder protector. El té es diurético, favorece la digestión, es rico en antioxidantes y tiene un efecto protector frente a cánceres y enfermedades cardiovasculares.

Zanahoria

La zanahoria es medianamente calórica (32 kcal/100 g). El micronutriente más destacado de la zanahoria es el betacaroteno: una sustancia que impulsa la vitamina A. Pero también contiene carotenoides que le confieren su poder antioxidante. Además presenta una gran concentración de minerales y fibras blandas. La zanahoria ayuda a prevenir el cáncer de pulmón y de mama, contribuye a regular la tasa de colesterol y protege el sistema cardiovascular, ayuda a prevenir las cataratas y el desprendimiento de retina.

 

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